Con tono de verdaderos ardidos, los directivos del Sao Paolo anuncian el despido de Juan Carlos Osorio, madrugando a la Femexfut que se ha decidido por traer al frente de nuestro Tri a este colombiano cuyo palmarés no impresiona a nadie.

Algo le habrán visto, pero por lo pronto se saca la lotería con un boleto que se encontró tirado en la banqueta.

Dos clases de técnicos

Hay solamente dos clases de directores técnicos en el intrincado mundo del futbol, los que llegan y los que pronto van a ser despedidos.

Hace algunos años, cuando el extraordinario Bora Milutinovic dirigía a nuestro Tri en uno de tantos viajes a Centroamérica y el Caribe para jugar uno de esos partidos en donde los rivales nos salen a jugar a morir, como si en ello les fuera la vida, habíamos empatado a cero goles y con ese resultado los jamaicanos aseguraban el boleto a Francia 98, el cual nosotros ya teníamos seguro incluso antes del partido.

Mucha gente predica y hasta saca la filosofía de los libros acumulados en los viejos estantes, en el sentido de que la suerte no existe, en contraparte, cada quien se la fabrica.

No estaría mal enviarles un video del triunfo de 1-0 de PUMAS sobre CHIVAS para echar por tierra esa teoría, es más, los filósofos muy necios podrían decir que ese juego es una excepción a la regla.

¡Ese poste!

Vientos de renovación sin duda en el beisbol, no en la Liga Mexicana ni en la Liga del Pacífico, que sin duda son dos ligas ejemplo, sobre todo por la forma de convivir entre ellas.

Hay que recordar que la Liga Mexicana de Beisbol, en donde hoy los campeones son los Tigres de Cancún y los anteriores los Diablos Rojos del México, termina la temporada justo cuando el verano está por irse.

Al más puro estilo de Hamlet, una de las obras emblemáticas del inmortal William Shakespeare, las dudas saltan y salpican en el seno de la Liga MX al cuestionar dos de las principales inquietudes que muchos tenemos acerca del equilibrio que no aparece por ningún lado.

‘Ser o no ser…