El gobierno tras el gobierno
Dicen que detrás de todo gran hombre hay una gran mujer…. pero ¿y detrás de un presidente? Sin duda un bloque político. Y Enrique Peña Nieto no es la excepción.
A punto de concluir las designaciones del gabinete ampliado, está claro el dominio de una triada de poder que tiene un mismo eje: Carlos Salinas de Gortari.
La trilogía la integran el ex presidente, su ex secretario de Hacienda, Pedro Aspe, y su alumno predilecto Luis Videgaray.
Indigo Staff
Dicen que detrás de todo gran hombre hay una gran mujer…. pero ¿y detrás de un presidente? Sin duda un bloque político. Y Enrique Peña Nieto no es la excepción.
A punto de concluir las designaciones del gabinete ampliado, está claro el dominio de una triada de poder que tiene un mismo eje: Carlos Salinas de Gortari.
La trilogía la integran el ex presidente, su ex secretario de Hacienda, Pedro Aspe, y su alumno predilecto Luis Videgaray.
En torno a ellos se entrelazan una docena de funcionarios que integran posiciones clave en el actual gabinete presidencial y cuyas relaciones se tejen entre ligas familiares, personales, académicas y profesionales.
Los nombramientos dados a conocer los últimos días muestran los vínculos de secretarios, subsecretarios y directores generales con personajes cercanos al salinismo.
Entre los nombres que se relacionan estrechamente con el exmandatario figura la trilogía energética: Emilio Lozoya Austin, director de Pemex, Francisco Rojas, director de la CFE y Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía.
También están Rosario Robles, en Desarrollo Social, José Antonio Meade, en Relaciones Exteriores, Alfonso Navarrete Prida, en la del Trabajo y Claudia Ruiz Massieu, en Turismo.
Todos en posiciones de primer nivel y que están unidos a Salinas, ya sea por relaciones políticas, profesionales o de parentesco.
Una liga esencial en la influencia de Salinas en el gabinete peñanietista es Pedro Aspe, quien fuera su secretario de Hacienda.
Aspe tiene una amplia red de influencia dentro del gobierno federal que abarca todos los niveles.
Algunos de los funcionarios fueron sus alumnos en el ITAM o trabajaron para él en Protego Asesores, una empresa de asesoría financiera de su propiedad.
Otra línea la constituyen los lazos familiares, como es el caso de Claudia Ruiz Massieu, quien es su sobrina. O el de José Antonio González Anaya, apenas ayer designado director del IMSS, que es su concuño.
Videgaray al frente
El más relevante es el de Videgaray, quien será la mano derecha en el manejo de las finanzas públicas para el presidente Enrique Peña Nieto.
El nuevo secretario de Hacienda y Crédito Público trabajó en la firma financiera Protego de Pedro Aspe, que se especializa en banca de inversión, además de asesorar a gobiernos estatales y dependencias federales.
Ahí Videgaray era el director de Finanzas Públicas Estatales y Municipales.
La influencia de Aspe en el Estado de México se remonta a una añeja alianza con Carlos Hank González, pues en la sucesión de 1994 Hank apoyó a Aspe para que fuera el candidato presidencial.
En 2004 Videgaray llegó al Estado de México con la encomienda de reestructurar la deuda del gobierno con bancos privados y banca de desarrollo.
Montiel lo nombró secretario de Finanzas y Peña Nieto lo ratificó en ese cargo. En menos de siete años se convertiría en el cerebro financiero y operativo de Peña Nieto.
Fue diputado federal, presidente de la Comisión de Presupuesto en la pasada Legislatura, aspiró a ser el candidato a gobernador del Estado de México, pero no obtuvo la candidatura.
Se disciplinó y coordinó la campaña de Eruviel Ávila y luego la de Peña Nieto.
Ahora ya instalado en Hacienda seleccionó para la subsecretaría a Fernando Aportela Rodríguez, un economista egresado del ITAM que trabajó como investigador en el Banco de México.
El nuevo subsecretario también tiene el mismo origen empresarial que Aspe y Videgaray.
Aportela fue presidente del Fondo de Infraestructura de Evercore-Protego, una división que asesora en la evaluación de asociaciones público-privadas.
Protego recientemente se asoció con Evercore Partners, empresa que está buscando clientes en México para asesorarles en el manejo de fondos de pensión, entre otras actividades.
Algunas compañías privadas e institutos gubernamentales son el apetitoso objetivo de Evercore, que ahora podría tener como aliados a sus exejecutivos.
Lazos personales
Pero aparentemente los nuevos funcionarios no solo tienen ligas profesionales sino también de carácter familiar o afectivo.
Claudia Ruiz Massieu, secretaria de Turismo, es sobrina de Salinas de Gortari ya que es hija de su hermana Adriana y el fallecido José Francisco Ruiz Massieu, quien fuera secretario general del PRI.
Otro funcionario de alta relevancia es José Antonio González Anaya, recién nombrado director del Seguro Social.
Él está casado con Gabriela Gerard, hermana de Ana Paula Gerard, esposa de Salinas de Gortari, por lo que es concuño del expresidente.
González Anaya en sus inicios profesionales trabajó en la oficina de la Presidencia bajo las órdenes de José Córdoba Montoya.
Pero Aspe también cuenta con afectos dentro del gobierno federal.
Aurelio Nuño Mayer es el nuevo jefe de la Oficina de la Presidencia de la República y con 34 años es uno de los más jóvenes funcionarios del actual Presidente.
Nuño ha mantenido una relación sentimental con Sofía Aspe Bernal, hija de Pedro Aspe, que ha sido reportada por revistas socialités como Quién.
Los otros Salinistas
Emilio Lozoya Austin tendrá a su cargo uno de los puestos más importantes del gobierno federal al ser designado como director general de Pemex.
Quien esté al frente de “La Joya de la Corona de las Paraestatales” es relevante, ya que a través de ella viene la mayor parte del financiamiento del gasto público.
Y nuevamente esta posición fue obtenida por un funcionario ligado con el grupo salinista.
Su padre, Emilio Lozoya Thalmann, compañero de banca de Carlos Salinas de Gortari, formó parte de su gabinete cuando llegó a la presidencia como primer director general del Issste (1988-1993) y luego como secretario de Energía (1993-1994).
Pero además, Lozoya Austin conoció a Peña Nieto cuando era gobernador del Estado de México a través de Luis Videgaray, quien al igual que él, fue alumno de Pedro Aspe en el Instituto Tecnológico Autónomo de México.
La influencia de Aspe, una de las personas más cercanas y confiables de Salinas de Gortari, es tal en el actual gobierno, que las dos reformas –fiscal y energética– tienen su sello.
Otro exfuncionario salinista vuelve al primer pleno del sector público: Francisco Rojas.
El nuevo director de la Comisión Federal de Electricidad, se desempeñó como director de Pemex en la época de Salinas de Gortari. Es hermano de Carlos Rojas, otro hombre muy cercano a Salinas.
Pedro Joaquín Coldwell será secretario de Energía del equipo entrante. Ocupó la dirección general del Fonatur en 1988 de la mano de Salinas y un año más tarde lo convirtió en secretario de Turismo.
Alfonso Navarrete Prida es el nuevo secretario del Trabajo. Fue el primer presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, luego Procurador General de la República y por último secretario de Gobernación.
Cabe recordar que se desempeñó como procurador mexiquense cuando asesinaron a Enrique Salinas, hermano del ex mandatario.
Otra salinista es la exjefa de gobierno del DF, Rosario Robles, quien será la titular de Desarrollo Social.
Sus vínculos con Salinas de Gortari datan de 2004, a raíz de los videoescándalos, como lo relató el empresario Carlos Ahumada en su libro “Derecho de Réplica”.
Incluso, compartió el pan y el vino con Salinas durante la comida que ofreció por la boda de su hijo Juan Cristóbal Salinas Occelli.
Robles fue presidenta del PRD, partido al que renunció en el 2004.
Los zedillistas
Otra parte importante del gabinete, conocido como los tecnócratas y de ligas zedillistas, también alcanzaron un lugar relevante.
Algunos de ellos también trabajaron con Salinas de Gortari pero se les identifica más con el grupo de Ernesto Zedillo.
Evidentemente perdieron la partida frente a la cantidad y calidad de los puestos logrados por los salinistas.
Emilio Chuayffet quien estará al cargo de la Secretaría de Educación Pública, fue presidente del IFE con Salinas, gobernador y secretario de Gobernación con Zedillo.
Chuayffet fue responsable de las negociaciones con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), y su lideresa Elba Esther Gordillo, fue su adversaria en 2003, cuando ambos disputaron el control de la fracción parlamentaria del PRI en la Cámara de Diputados.
La trayectoria de Chuayffet en el Estado de México no se explica sin el padrinazgo de Carlos Hank González.
Jesús Murillo Karam, nuevo Procurador General de la República, llegó a la gubernatura de Hidalgo en 1993, impulsado por Carlos Salinas, pero se le vincula al grupo de Zedillo.
Ildefonso Guajardo trabajó en la Secretaría de Programación y Presupuesto durante el sexenio de Miguel de la Madrid, antecesor de Salinas, y ahora estará al cargo de la Secretaría de Economía.
Pero una buena parte de su desarrollo en el gobierno fue bajo el mandato zedillista, cuando ocupó el cargo de Oficial Mayor de la Secretaría de Relaciones Exteriores, entre 1994 y 1997.
Posteriormente fue nombrado subsecretario de desarrollo turístico de la Secretaría de Turismo, en el mismo sexenio.