No están para faenas
La prohibición de las corridas de toros en la capital del país seguirá siendo una ilusión. Y es que los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal congelarán esa propuesta, al menos, hasta que concluya el proceso electoral 2015.
En los últimos días un grupo de legisladores del PAN, PRI, Panal, PVEM y hasta del PRD han exigido que esta iniciativa de ley se discuta ya, en comisiones y en el Pleno de ese órgano colegiado.
Jonathan VillanuevaJorge Gaviño, de Alianza Ciudadana, presentó una excitativa a Óscar Moguel, de Movimiento Ciudadano, para que la propuesta se discuta cuanto antes
De manera extraoficial, se acordó fijar una postura imprecisa para no echarse de enemigos a los empresarios de la fiesta brava ni a los defensores de animales
La prohibición de las corridas de toros en la capital del país seguirá siendo una ilusión. Y es que los diputados de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal congelarán esa propuesta, al menos, hasta que concluya el proceso electoral 2015.
En los últimos días un grupo de legisladores del PAN, PRI, Panal, PVEM y hasta del PRD han exigido que esta iniciativa de ley se discuta ya, en comisiones y en el Pleno de ese órgano colegiado.
La presión también la ejercen asociaciones protectoras de animales, manifestándose en el Recinto de Donceles y Allende todos los días de sesión y bombardeando a los asambleístas a través de redes sociales.
La semana pasada, el diputado aliancista Jorge Gaviño presentó una excitativa a su compañero Óscar Moguel, de Movimiento Ciudadano, para que la propuesta se discuta cuanto antes, ya que está congelada hace casi dos años.
En respuesta, el de MC solicitó a la Comisión de Gobierno de la ALDF una postura oficial sobre el tema, para tener claridad si es posible o no dictaminar un proyecto de esa índole, pero nunca recibió respuesta.
Pero con el paso de los días la presión obligó a la Asamblea a emitir una opinión y ayer acordaron discutir hoy en comisiones la propuesta de vetar las corridas de toros o la de limitar la entrada a ese tipo de espectáculos a mayores de edad.
Sin embargo, de manera extraoficial, los cercanos al presidente de la Comisión de Gobierno, Manuel Granados, acordaron fijar una postura imprecisa, para no echarse de enemigos a los empresarios de la fiesta brava y a los animalistas.
Esta consiste en posponer la discusión para un periodo extraordinario, que se llevaría a cabo una vez que termine la jornada electoral en la que se elegirán a los 16 nuevos jefes delegacionales y los 66 diputados locales.
Hasta el cierre de esta edición, el argumento consistía en explicar a los medios de comunicación que no existen condiciones para abordar el tema, ya que no se ha escuchado a las partes involucradas.
La postura oficial saldrá de la Comisión de Gobierno y será leída por Óscar Moguel, que hasta ayer no tenía el aval de los promoventes de la iniciativa: Jesús Sesma y Jorge Gaviño, así como el bloque bejaranista, que aún evaluaba su postura.
Una historia de faenas
Desde la V Legislatura, diputados del PRD y del PRI impulsaron reformas a la Ley de Espectáculos Públicos para prohibir las corridas de toros al considerarlas una especie de tortura animal.
La discusión escaló. Los grupos protectores de animales intensificaron sus protestas hasta que el empresario Rafael Herrerías acudió a la ALDF a hablar con los legisladores; después de ello, congelaron la propuesta.
Al arranque de esta legislatura, el diputado del Partido Verde Ecologista de México, Jesús Sesma, insistió en el tema y presentó una iniciativa, que fue respaldada por Jorge Gaviño de Nueva Alianza.
Tras cinco meses de tenerla en la congeladora, Gaviño presentó una excitativa para que la Comisión de Administración Pública Local dictaminara. La presidenta de la Mesa Directiva, Karla Valeria Gómez, retornó la iniciativa de ley.
Pasó a la Comisión de Normatividad Legislativa, Estudios y Prácticas Parlamentarias que encabeza Óscar Moguel, quien también la dejó en el olvido durante ocho meses, hasta que Gaviño presentó otra excitativa acompañado de la diputada Priscila Vera, del PAN.
Además la respaldaron con la firma de 42 diputados más que apoyaban la propuesta de discutir la prohibición de toros en este periodo ordinario de sesiones, el cual concluye en mes y medio.
El diputado Óscar Moguel contestó que no puede prohibirse las corridas de toros hasta que no se tenga una estrategia económica para que las más de 14 mil familias que dependen de la fiesta brava tengan una opción laboral.
Aún así se acordó discutir el tema en una sesión hoy las 10:00 am, motivo por el cual los integrantes de la Comisión de Gobierno se encerraron ayer durante tres horas a hablar del tema.
La pugna
La reunión fue a puerta cerrada y de acuerdo con el presidente de la ALDF, Manuel Granados, y el asambleísta Jorge Gaviño, no se podían pronunciar sobre el tema hasta el día de hoy.
“No podemos hablar del tema. El único autorizado para hacerlo es Óscar Moguel. Nosotros vamos a tomar decisiones en las próximas horas”, dijo Granados.
De acuerdo con fuentes consultadas por esta casa editorial, en la reunión el PRD pidió firmar un documento avalado por los coordinadores de todas las bancadas para recorrer esa discusión hasta después de la jornada electoral.
Pero Jesús Sesma se negó, debido a que él fue uno de los promoventes de la iniciativa; lo mismo pasó con Jorge Gaviño.
Pero los afines a Manuel Granados le echaron en cara al PVEM que él se había comprometido a no impulsar la prohibición de las corridas de toros a cambio de las restricciones animales en los circos.
Y por el PRD, la diputada Ariadna Montiel añadió que si no firmaban todos, ese acuerdo, ella tampoco lo haría. Pero esa negociación se extendió toda la tarde de ayer.
Previo a ello, ya habían acordado aprobar en comisiones, solo la restricción de menores a espectáculos taurinos. Incluso, circularon el dictamen, del cual Reporte Indigo posee una copia.
Pero ante la negativa de los promoventes a firmar un documento que posponga toda la discusión se acordó mayoritearlos y bajar de la orden del día la discusión del dictamen que prohíbe la entrada a menores de edad.
El tema en sí genera negativos para las aspiraciones políticas de los asambleístas que en menos de tres meses promoverán sus candidaturas a otros puestos de elección popular. Por eso el tema se volverá a quedar en el olvido.
