Talento ‘low profile’

Megan Ellison no es cualquier niña rica. Sí, detrás de las arriesgadas –y millonarias– apuestas que Ellison ha hecho recientemente por sacar a flote el cine independiente está la fortuna de su padre, el magnate Larry Ellison, cofundador de Oracle y magnate de Sillicon Valley, la tercera mayor fortuna de Estados Unidos, según la revista Forbes. 

Con esa fortuna, la joven productora de 27 años está revolucionando la industria del cine de autor.

Megan Ellison no es cualquier niña rica. Sí, detrás de las arriesgadas –y millonarias– apuestas que Ellison ha hecho recientemente por sacar a flote el cine independiente está la fortuna de su padre, el magnate Larry Ellison, cofundador de Oracle y magnate de Sillicon Valley, la tercera mayor fortuna de Estados Unidos, según la revista Forbes. 

Con esa fortuna, la joven productora de 27 años está revolucionando la industria del cine de autor.

Y es que a pesar de que se ha mantenido en un perfil bajo y se niega a dar entrevistas, sigue los pasos del gigante de los Oscares y el productor más temido Hollywood, Harvey Weinsten.

Las inversiones que Ellison ha realizado en películas como “Zero dark thirty” (“La noche más oscura”), de Kathryn Bigelow y “The master”, de Paul Thomas Anderson –con las que obtuvo ocho candidaturas a los Premios de la Academia el año pasado– no son los caprichos de úsese y tírese de una niña rica. 

Sino que son el reflejo de una joven apasionada y enamorada por un cine intelectual que rivaliza con las grandes superproducciones comerciales. 

Entre los filmes más recientes producidos por su casa productora, Annapurna Pictures, están “American hustle”, de David O. Russell, y “Her”, de Spike Jonze, dos de las nominadas a Mejor Película en los Oscares de este año. 

Aunque fue un total de 17 nominaciones las que recibieron sus películas, que incluyen a “The grandmaster”, del director chino Wong Kar Wai’s.

Bill Gerber, productor de la película “Gran Torino” de Clint Eastwood, en entrevista para Reuters dijo que Megan “está llevando a la pantalla grandes proyectos y está haciendo cosas buenas para este negocio. Es como el productor legendario Hal Wallis (“Casablanca”), quien apostó por productores y les dejó que hicieran realidad sus sueños”.

Ellison desertó de la Universidad del Sur de California (USC), al igual que su hermano mayor, David, con quien también ha invertido en proyectos cinematográficos, como el western “True grit”, de los hermanos Ethan y Joel Coen. 

David Ellison también cuenta con su propia productora de nombre Skydance Productions. Pero, a diferencia de Megan, el joven se enfoca en megaproducciones de acción como “Star Trek: en la oscuridad”, a cargo del director J.J. Abrams. 

Durante su adolescencia, Megan Ellison fue una competidora ecuestre, participando en torneos como los del Campeonato Norteamericano de Jóvenes Jinetes (NAJYRC, por sus siglas en inglés).

Las sumas millonarias comenzaron a salir del bolsillo de la también llamada “salvadora del cine indie” para financiar películas arriesgadas a partir de que su padre, Larry Ellison, la hizo acreedora de un regalo con valor de 200 millones de dólares por su cumpleaños número 25, en el 2011.

En el 2012, Ellison también se comprometió a resucitar la famosa franquicia cinematográfica de la saga de “Terminator”, con Arnold Schwarzenegger como protagonista, haciéndose de los derechos por 20 millones de dólares.

Tim Gray, editor de la revista Variety, comentó a la BBC que Megan Ellison “está produciendo películas inteligentes y, si bien es cierto que está aprovechando el dinero de su familia, parece que sabe lo que está haciendo. Creo que en unos pocos años ha demostrado lo que vale. Soy un gran fan de su trabajo como productora”.

Y agregó que “personas como ella son necesarios en la industria del cine. Las películas que produce se parecen a las que se hacían en Hollywood en los años 70, cuando los productores se arriesgaban contando historias importantes”.

 

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