Paternidad virtual, anécdotas de Omar Martinez
Desde su cuenta de Instagram, De hijo a padre, Omar Martínez ha compartido algunas de las anécdotas que ha vivido al lado de su hijo de siete años, Sebastián, de quien ha aprendido más, de lo que él le ha enseñado. Además, invita a otros padres y madres a dejar de tolerar a sus hijos para comenzar a disfrutarlos
Fernanda MuñozUna noche, Omar Martínez estaba en casa con su hijo de siete años, Sebastián, quien brincaba por todas partes intentado jugar con su papá, pero él se encontraba en su recámara furioso, pues horas antes había tenido problemas con una empresa de delivery.
—Sebas, porfa, no puedo jugar contigo, estoy muy molesto, le dijo Omar a su hijo, quien salió del cuarto, para regresar minutos después, pero esta vez con dos osos de peluche en las manos.
—Sebas, te dije que no puedo jugar ahorita, le volvió a asegurar su padre, aún enojado.
—Papi, no, yo no quiero jugar, lo que pasa es que le expliqué a tigrecito y a rojito que estabas muy molesto y acordamos que debíamos comerte a besos.
El comentario de Sebastián provocó que su padre pasara de la ira al amor y de ahí a la felicidad en un segundo, haciéndolo entender que su hijo tenía la capacidad de observar, de comprender qué emoción estaba viviendo él en todo ese tiempo y, más importante, de saber cómo podría solucionarlo.
Esta anécdota está escrita en la cuenta de Instagram (De hijo a padre) que Omar Martínez creó hace un par de meses, a inicios de la pandemia por COVID-19, para compartir gran parte de las conversaciones que ha tenido con Sebastián desde que él empezó a hablar fluidamente.
Antes de abrir la cuenta de Instagram y hacer públicos algunos recuerdos que tiene con su hijo, Omar compartía sólo con amigos en Facebook, de manera privada, lo que vivía día a día con Sebas; sin embargo, gracias a los comentarios que recibía, consideró que era momento de hacer algo más.
Actualmente, las historias de Omar con su hijo Sebas ya no sólo las leen sus amigos más cercanos ni su familia, sino gente de Argentina, España, Guatemala, México, Venezuela, de donde es originario, y de Perú, donde vive desde hace cuatro años.
En entrevista, el creador detrás de De hijo a padre comparte que en un inicio veía difícil la idea de que a otros les gustaran sus anécdotas, su paternidad consciente y activa, o que incluso pudiera tener tanto impacto.
“Ver la respuesta de la gente me ha llevado a pensar que muchas de las cosas que tengo para mí, incluso, podrían ser de mayor utilidad si las comparto (…) A la larga creo que estos diálogos de alguna u otra manera terminan siendo la voz de muchos que bastantes padres terminan teniendo con sus hijos, entonces, creo que eso genera una inspiración muy clara en el proceso”, declara Martínez.
Una invitación a escuchar de Omar Martínez
Omar vive en Lima, Perú, pero independientemente de eso, sus mensajes han sabido llegar a todo el público de habla hispana; sin embargo, no en todas las familias pasa lo que él tiene con Sebastián, pues hay padres o madres menos accesibles con sus hijos.
Al respecto, Martínez detalla que disfruta mucho escuchar y estar atento a lo que su hijo le dice en cada momento, e invita a otros padres y madres a hacer lo mismo, pues la vida es muy corta.
Para él, una paternidad consciente es aquella que lleva a los padres a involucrarse porque, desde que nacen sus hijos, realmente cambian como seres humanos y entonces los escuchan y están para ellos con gusto.
“Básicamente no los invitaría a tolerarlos, sino a hacer un salto cuántico a disfrutarlos. Porque creo que tolerarlos no es lo mejor, a mí no me gusta ni siquiera la idea de tolerar a una persona, a mí me gusta más la idea de respetar. A la larga el tiempo que tenemos acá es un ratito y cada cosa que hacemos o dejamos de hacer en el proceso de crianza tiene un impacto importante en ellos”, destaca.
Antes de haber creado De hijo a padre, Omar conversó con la mamá de Sebas, de quien está separado, y con quien acordó diferentes puntos. Uno de los más importantes fue no publicar contenido que de alguna u otra manera pueda resultar ofensivo para su hijo en un futuro, pues él aún no es consciente de muchos temas.
Sin embargo, Omar resalta que aunque a su hijo le faltan muchos años por vivir, con siete años ya le ha enseñado muchas cosas a su padre, por eso el nombre de la página en Instagram, De hijo a padre.