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¡Salve a quien será rey!

Desde las tierras lejanas del cine europeo, es gozo y beneplácito el recibir en México la adaptación fílmica de la  trágica –y además clásica– obra de William Shakespeare.

En la cinta dirigida por Justin Kurzel, el teutón Michael Fassbender encarna a Macbeth, quien recibe la visita de cuatro mujeres que le vaticinan su destino: “¡Salve Macbeth, que de aquí en adelante serás rey!”.

Lady Macbeth es interpretada por la francesa Marion Cotillard, quien enterada del presagio exhorta a su hombre para cumplir el hado. 

La película recibió una ovación de pie de 10 minutos al final de su proyección en Cannes

Desde las tierras lejanas del cine europeo, es gozo y beneplácito el recibir en México la adaptación fílmica de la  trágica –y además clásica– obra de William Shakespeare.

En la cinta dirigida por Justin Kurzel, el teutón Michael Fassbender encarna a Macbeth, quien recibe la visita de cuatro mujeres que le vaticinan su destino: “¡Salve Macbeth, que de aquí en adelante serás rey!”.

Lady Macbeth es interpretada por la francesa Marion Cotillard, quien enterada del presagio exhorta a su hombre para cumplir el hado. 

Juntos recorrerán un camino lleno de ambición, traición y tormento hasta lograr el cometido que se ha engarzado en la mente de Macbeth.

Lo clásico siempre será actual

En la trama, el lenguaje es rico por el habla del inglés británico, pondera el uso antiguo a la usanza Shakesperiana, sin embargo los guionistas Jacob Koskoff, Michael Lesslie y Todd Louiso adaptaron de manera libre el texto isabelino para traerlo a la era moderna.

Las licencias propiamente recaen en el uso de algunos personajes, hechos o circunstancias que se indicaban en el libreto original. Aunque estos detalles sean ensombrecidos el filme reluce por el esfuerzo de adaptar la obra a 113 minutos en pantalla, cuando la puesta en escena dura alrededor de 135 minutos.

Embelesamiento a la vista

Majestuosos parajes británicos son exaltados en la producción. La Isla Skye, en Escocia, la Catedral de Ely en Cambridgeshire, Inglaterra, el Castillo Bamburgh en Northumberland, son algunos ejemplos de las locaciones utilizadas para la filmación de “Macbeth”.

La cinematografía de Adam Arkapaw arroya a los sentidos al tener los tactos necesarios para dar peso dramático a distintos matices dentro de la trama: Secuencias bélicas que se detienen en el tiempo cual narrativa de Borges, sombrío cariz ante la tensión en el trono de Macbeth y su parlamento, amplios paisajes de enorme naturaleza verde retratan la bonanza fértil del Reino Unido, y la lista continúa.

Para enamorar al oído

El agregado indispensable para esta tragedia shakesperiana es su musicalización, que corrió a cargo de una composición original de Jed Kurzel.

El sentimiento ante el duelo, la duda que atisba a Macbeth, la batalla campal para otorgar la victoria a Duncan, el sopor ante la aparición de las brujas, son emociones trasvasadas de la partitura a una orquesta que ejecuta con maestría las notas para marcar un soundtrack hacia la inmortalidad.

> TRIADA DE ÉXITO

Michael Fassbender y Marion Cotillard volverán a actuar juntos el siguiente año con la dirección de Justin Kurzel en la adaptación del videojuego “Assassin’s Creed”, que tiene por fecha de lanzamiento el 21 de diciembre de 2016.