¡Mexicanos al grito de Oscar!
Antes México exportaba mano de obra que solamente aspiraba a poder ser jardineros, meseros, amas de llaves, jornaleros y mejores puestos imaginables en la tierra del Tío Sam. Hoy, el cine hollywoodense apremia a realizadores mexicanos que hacen su cine y es catalogado “el mejor” de la industria del séptimo arte estadounidense.
Hidalgo Neira
Antes México exportaba mano de obra que solamente aspiraba a poder ser jardineros, meseros, amas de llaves, jornaleros y mejores puestos imaginables en la tierra del Tío Sam. Hoy, el cine hollywoodense apremia a realizadores mexicanos que hacen su cine y es catalogado “el mejor” de la industria del séptimo arte estadounidense.
Y es que los tuits no se hicieron esperar “Lubezki Bicampeón”, “¡Chivo Bicampeón!”, “Bravo #Lubezki”, entre otros, y apenas se calentaban motores en la gran noche de la 87 entrega de los Premios Oscar cuando Emmanuel Lubezki ganó por segunda vez consecutiva el Oscar a Mejor Cinefotografía, en esta ocasión por “Birdman”, dirigida por Alejandro González Iñárritu.
A pesar de que “El gran hotel Budapest” le llevaba la delantera en galardones, “Birdman” tomó el carril de alta velocidad y rebasó dejando atrás a una de las favoritas del cine independiente.
Alejandro González Iñárritu viene a marcar una historia en la Academia, al ser el segundo director mexicano en ganar la presea a Mejor Director en segundo año consecutivo, ya que Alfonso Cuarón ganó en 2014 por la cinta “Gravedad”.
“El Negro” agradeció en su discurso al ganar también el Oscar a Mejor Película, a todos los inmigrantes mexicanos que han ayudado a construir y persistir en la nación estadounidense.
Trayectoria que merece honrarse
Después de que su ópera prima “Amores perros” (2000) fuese nominada como Mejor Película Extranjera en los Premios de la Academia en 2001, Iñárritu atrajo rápidamente la atención del circuito de productores hollywoodenses, produciendo en 2003 “21 gramos” en la que compartirían cuadro actores de la talla de Sean Penn, Naomi Watts y Benicio del Toro.
Iñárritu se mantuvo en el borde del cine independiente y marcando su narrativa con el estilo del dolor durante sus siguientes proyectos: “Babel” del 2006 y “Biutiful”en el 2010. Recordemos que su “divorcio profesional” con el ahora cineasta y guionista Guillermo Arriaga se dio en la cinta del 2006, esta dupla venía desde la primera cinta del que fuera también productor radiofónico en una importante estación de la Ciudad de México.
Al fin, después de marcar una filmografía inicial llena de melancolía y películas de temática angustiosa, Iñárritu se renueva con “Birdman” una cinta de corte cómico satirizando de manera curiosa al actor Michael Keaton, quien interpreta a Riggan Thompson, un actor que vive a la sombra de su éxito como superhéroe de una franquicia ya olvidada por el público, –Birdman– y ahora busca reivindicarse como un actor que es capaz de superarse a si mismo en el escenario de Broadway.
Manufactura mexicana sin precedentes
La noche de ayer los premios Oscar supieron dar su lugar a los mexicanos que están creando filmes que están cambiando la manera de hacer cine en Hollywood.
Ya que la propuesta visual de “Birdman” de hacer parecer que la cinta está hecha en un solo plano secuencia es una planeación magistral de Emmanuel “El Chivo” Lubezki, quien antes había sido nominado por la fotografía de cintas como “La princesita” (1995), “La leyenda del jinete sin cabeza” (1999), “Niños del hombre” (2006), entre otras.
A pesar de que “Birdman” contaba con nueve nominaciones en los premios Oscar, incluyendo categorías como Mejor Actor, Mejor Actor Secundario, Mejor Actriz Secundaria, etc. La cinta se logró colar entre los premios mayores ganando, Mejor Guión Original, Mejor Director, Mejor Cinefotografía y Mejor Película.
Dos años consecutivos los Oscares a Mejor Dirección, y mejor Cinefotografía se van a casa de mexicanos, ¿Acaso el 2016 podrá ser un año en el que los realizadores de nuestro país puedan llevarse el título de “tricampeones” en la cinematografía?
Desnudó a los Oscares
“¿Cómo intentas ganarle a esa selfie que rompió el Internet?”. Fue lo que hace unos días preguntó Neil Patrick Harris a la comediante y anfitriona de los Premios Oscar del año pasado Ellen Degeneres, cuya icónica selfie dio la vuelta al mundo, con un número récord de 3.4 millones de retuits.
Quizá se intenta al reconocer públicamente, y entre broma y broma, el motivo de inconformidad de miles de internautas: la falta de diversidad racial entre los aspirantes a los premios de la 87 edición de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas.
“Hoy honramos a los mejores y más blancos de Hollywood. Perdón, los más brillantes”, dijo.
Así, con estas palabras de bienvenida, e indirectamente aludiendo al hashtag #OscarsSoWhite, debutó como maestro de ceremonias de los Oscares el también ganador de varios premios Emmy por sus trabajos previos como anfitrión en los Tony Awards quien, como lo suele hacer cada vez que sube a un escenario -y lo hizo al abrir la ceremonia de los Oscares en 2010-, interpretó un número musical al estilo Broadway, haciendo de su intervención todo un espectáculo.
“Moving Pictures”, la canción original escrita por Kristen Anderson y Robert Lopez -los productores del tema “Let it go”, de la película animada “Frozen”-, rindió tributo a una de las películas más icónicas de las últimas décadas, como el “Mago de Oz”, “Star Wars: Episodio IV. Una nueva esperanza” y “Risky Business” -la escena en donde Tom Cruise baila en ropa interior-.
Los montajes del escenario mostraron a Harris “Cantando bajo la lluvia” y entre las piernas de Sharon Stone, en “Instinto básico”.
El protagonista de “How I met your mother” cuenta con más de 13.5 millones de seguidores en Twitter, no trajo pizza Big Mama’s & Papa’s a los asistentes como lo hizo Degeneres en 2014, pero “realmente se desnudó para los Oscars este año”, publicó Time.
Porque nadie dejará de hablar de ese toque irreverente y creativo que el actor de 41 años dio a la ceremonia con esa parodia en el que combinó escenas de las galardonadas “Whiplash” y “Birdman”.
Harris no pudo entrar a su camerino, por lo que se vio obligado a salir, en ropa interior recordando la escena de la película de “Birdman”, en la que Michael Keaton camina en calzones.
Harris se apresuraba a salir al escenario al ritmo de la batería del actor estadounidense Miles Teller, quien personifica a Andrew Neiman, el joven baterista que protagoniza la cinta dirigida por Damien Chazelle.
Alfombra roja y variada
Patricia Arquette le dijo a Ryan Seacrest que no tuvo tiempo de hacerse manicure porque pasó la mañana ocupada lanzando su nueva campaña con Chideo, The Charity Network. Eligió el día de los Oscars para dar a conocer una lotería en la que un ganador pasará el día con ella en un viaje humanitario internacional este año.
Arquette obtuvo el Golden Globe y el Screen Actors Guild Award por su papel en “Boyhood”.
La actriz también mencionó la Mani Cam de E!, que desapareció desapareció este año luego de tres temporadas de premiaciones. En años pasados, Elisabeth Moss decidió levantar su dedo medio para la camarita en lugar de enseñar su manicure, Julianne Moore y Jennifer Aniston se negaron a usarla, y Jennifer Lawrence cumplió una apuesta con Emma Stone al gritarle a la pequeña cámara, aunque el momento no fue grabado.
Gina Rodríguez, de la serie “Jane the virgin”, fue con un vestido eco-friendly en seda de chícharos. Fue parte de la campaña “Red Carpet Green Dress” de diseñadores amigables con el medio ambiente. Manon Gabard y Tingting Chen, estudiantes de ESMOD-ISEM en París, crearon atuendos para Rodriguez y Jake McDorman respectivamente. El tux de Jake McDorman, de “American Sniper”, fue hecho también de la misma seda y de cáñamo o hachís.
La actriz de “Wild”, Laura Dern, usó un anillo para hacer honor a su personaje Bobbi Lambrecht, quien falleció de cáncer de pulmón.
De nuevo, ‘El Chivo’
Emmanuel “El Chivo” Lubezki es el mejor cinefotógrafo de la actualidad. No solamente porque se llevó por segunda vez consecutiva el Oscar a la Mejor Fotografía (el año pasado lo obtuvo por “Gravity”), sino porque, nuevamente, trabajó haciendo mancuerna con un mexicano. Para “Gravity” con su amigo Alfonso Cuarón, y ahora con González Iñárritu en “Birdman”. Lubezki es un poeta audiovisual, con más de 20 años de carrera, y el respeto de la crítica y el público dentro y fuera de Hollywood.
Al fin, Alexandre
Alexandre Desplat era como el Leonardo DiCaprio de la categoría Mejor Banda Sonora. Estuvo nominado en ocho ocasiones a los Premios de la Academia, pero nunca se llevaba una estatuilla a casa.
En estos Oscares compitió por dos películas, “The Grand Budapest Hotel” y “The imitation game”. Y obtuvo el codiciado galardón por “The Grand…”, rompiendo con la “maldición” que traía.
Por la igualdad en Hollywood
Tanto Patricia Arquette en su speech tras ganar por Mejor Actriz de Reparto por “Boyhood”, como Reese Whiterspoon, le dieron voz y protesta a las mujeres en Hollywood. Reese inició un “movimiento para inspirar a los reporteros a hacer preguntas creativas en la alfombra roja” con el hashtag #AskHerMore en Instagram. Posteó estar emocionada por hablar sobre lo que llevaría puesto, pero que hay cosas más importantes que lo que las actrices usan.