Redes de poder MTY: Rebeldía de Nava y ‘Privatizan’ Parque Tamayo

El alcalde de Santa Catarina, Jesús Nava, renunció este fin de semana al Partido Acción Nacional (PAN), con lo que empezaron a correr las versiones que lo ponían ya como militante de Movimiento Ciudadano; aunque el propio Nava aclaró que no está afiliado a un instituto político, aún.

Y todo esto solo genera dudas de su estabilidad para gobernar un municipio, sin duda. Resulta muy ingenuo Nava al pensar que, tras esta traición, pueda transitar con un Cabildo con mayoría panista. Y peor aún, con una mayoría albiazul en el Congreso local, que es donde se decide, por ejemplo, si se aprueban o no sus cuentas públicas.

Pero existe una versión de que lo de Nava podría tratarse de una especie de amenaza hacia el interior del PAN para lograr una negociación exitosa, ya que Nava no saldría solo, pues se vendría una supuesta desbandada panista hacia MC.

Esto ya ocurrió cuando el Grupo Santa Catarina, que lidera Víctor Pérez, amenazó con irse al partido naranja previo a la elección. Con el comportamiento de regidores y diputados en los próximos días se irá esclareciendo si todo fue un show político, una rebeldía de Nava o en realidad una parte del panismo se puede vestir de naranja.

‘Privatizan’ Parque Tamayo

Este fin de semana el Parque Rufino Tamayo, en San Pedro, fue utilizado para un evento privado evitando la entrada a usuarios de este espacio público. Resulta que se proyectaron películas relacionadas con el cuidado del medio ambiente, pero con cena y venta de bebidas alcohólicas.

Y claro, quien no pagaba los 3 mil 800 pesos que costaba este paquete de alimentos y bebidas no podía ni siquiera pasar por la explanada de este parque porque era un evento privado.

El alcalde de San Pedro, Miguel Treviño, podría salir a justificar este evento, pero la realidad es que se está aprovechando de un bien público para ciertas personas que tienen influencia en el Cabildo o incluso con el propio edil para explotar el Parque Rufino Tamayo.

Y mientras Treviño aprueba una “sana convivencia”, a quienes pasean los perros en este espacio público los tienen con más restricciones.