Todo depende del déficit

En el día uno de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Estados Unidos dejó perfectamente claro que tiene dos objetivos prioritarios: reducir su déficit de cuenta corriente y elevar las reglas de contenido de origen regional.

“Buscamos un comercio libre y justo, en el entendido de que no se trata de un juego de suma cero”
Chrystia FreelandMinistro de Relaciones Exteriores de Canadá

En el día uno de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Estados Unidos dejó perfectamente claro que tiene dos objetivos prioritarios: reducir su déficit de cuenta corriente y elevar las reglas de contenido de origen regional.

El primero, es irrelevante a los ojos de la teoría económica ortodoxa. Esta variable depende de la estructura de ahorro de la economía estadounidense, no de cambios en la política comercial. Chrystia Freeland, la ministro de Relaciones Exteriores de Canadá, declaró que, para su país, el déficit de cuenta corriente no representa una medida para definir el éxito del TLCAN.

El segundo objetivo, rechazado abiertamente por Ildefonso Guajardo, el secretario de Economía de México, es un medio indispensable para conseguir el primer propósito. De hecho, sin esta medida, la administración de Donald Trump, necesitada de una victoria política, difícilmente podrá venderle la idea de una renegociación favorable a su audiencia doméstica.

El consenso de analistas espera que la discusión de las reglas de origen, que determinan el porcentaje de los componentes que debe tener un producto de exportación para no estar sujeto a un arancel, sea uno de los temas más ásperos de la renegociación. Para el sector automotriz, la regla es del 62.5 por ciento, una de las más altas del mundo.

La industria automotriz y los grupos de cabildeo que defienden sus intereses se han opuesto tajantemente a elevar aún más el techo de las reglas de origen.

Sin embargo, se prevé que la delegación estadounidense será muy agresiva en el manejo de este tema. El déficit comercial de Estados Unidos con México del año pasado fue de 64.1 mil millones de dólares, de acuerdo al Departamento de Comercio. Pero, si se anula el rubro de productos automotrices y equipo de transporte en esta medición, Estados Unidos registraría un superávit comercial de 3.7 mil millones de dólares con México. 

La fuente del déficit recae en un solo sector. Paradójicamente, se trata del sector más exitoso del TLCAN.

Comercio balanceado

Es verdad, Estados Unidos mantiene un déficit comercial de 64.1 mil millones de dólares con México. Sin embargo, la cifra está basada únicamente en la dinámica del sector automotriz y de transporte. Si se elimina este rubro, Estados Unidos registra un superávit comercial con México de 3.7 mil millones de dólares.

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