Commodities en el hoyo

El colapso que los precios de los commodities (término que hace referencia a materias primas como el petróleo, los metales, y los productos agrícolas, entre otros) han experimentado en el mercado en los últimos 15 meses está cobrando factura a las empresas que producen estas mercancías y amenaza con arrastrarlas a una profunda crisis.

El índice de commodities producido por Bloomberg muestra que el valor de estas mercancías se encuentra en su punto más bajo en 16 años, y es actualmente 50 por ciento más bajo que en 2011, cuando se dio el último pico alcista.

Esta semana, tres empresas han sido las principales representantes de las dificultades que ha traído esta situación: Shell, Alcoa y Glencore.

La petrolera Royal Dutch Shell anunció el lunes que cesaría su exploración en las aguas del Ártico, tras haber gastado 7 mil millones de dólares en este proyecto, debido a que los decepcionantes resultados de producción obtenidos no son rentables bajo el actual escenario de precios.

El mismo día, el gigante de aluminio Alcoa anunció que se dividirá en dos empresas, separando sus exitosas operaciones de manufactura de valor agregado de sus actividades más presionadas como las operaciones de minería y producción.

También durante la misma jornada, el valor de las acciones de la minera y corredora de commodities Glencore se desplomaron en un 30 por ciento hasta tocar un mínimo histórico. Esta caída se dio tras la publicación de una advertencia por parte de la administradora de activos Investec, quien pronosticó “severos problemas” si Glencore no recorta su nivel de deuda o si los precios de sus mercancías no se recuperan.

Del crash a la crisis

Bloomberg reporta que las preocupaciones de los inversionistas de estas tres empresas y de otras similares se han intensificado ante dos factores: la continua desaceleración económica de China y el prospecto de un alza de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).

La caída de la demanda en China, que actualmente experimenta su menor crecimiento económico en 25 años, ha obligado a los productores de ese país a exportar sus enormes inventarios de commodities a precios muy reducidos. Esto está inundando mercados que ya estaban experimentando sobreoferta y presionando aún más los precios de estos productos.

Por si fuera poco, la posibilidad de que la Fed, el banco central estadounidense, alce su tasa de interés de referencia antes de que cierre el 2015 preocupa a los analistas debido a la enorme carga de deuda a la que se enfrentan muchos productores de commodities.